Yo tengo un sueño, pero mi sueño es muy diferente y lejos está de siquiera parecerse al sueño que tuvo Martín Luther King en su momento, ya que mi sueño va más allá de los derechos civiles y políticos. Mi sueño es un sueño de igualdad, de justicia, esperanza, pero sobre todo, es un sueño por la libertad, por la vida; mi sueño es que todas las mujeres podamos tener el derecho a la no maternidad.
Quiero comenzar este texto con algunos de los argumentos de las personas que están en contra del aborto:
El producto es cosa de dos no solamente de la mujer: Si bien es cierto que para que exista la fecundación se necesitan dos personas, solamente una es la que carga con todo el embarazo desde la concepción hasta el alumbramiento, en muchas ocasiones únicamente en la concepción es donde interviene el hombre, ya que muchos suelen desentenderse: “Para qué no te cuidas” “Ése no es mi problema” “Yo no quiero un hijo” “Ése es tu problema”, suelen alegar. Por tanto, deja de ser cosa de dos y pasa a ser un asunto que únicamente le corresponde a la mujer.
El derecho a la vida: Yo me pregunto ¿acaso con el aborto se está matando a alguien? ¿se apuñala o se dispara a alguna persona? Lo que crece en el vientre de la mujer aún no es un ser humano, es un embrión, un proyecto. Por eso no se puede hablar de un ser humano hasta después de las 12 semanas de gestación.
Motivos religiosos: Dios quiere que tengas un hijo y tendrás los hijos que dios te dé. Si lo abortas será un pecado y te vas a ir al infierno.
Motivos morales o sociales: Abortar es malo, imagínate que tu madre te hubiera abortado. Serás una asesina.
A continuación daré algunos puntos de la otra cara de la moneda, es decir los argumentos del por qué debe legalizarse el aborto y los beneficios que dicha legalización traería.
El derecho a la vida: Este derecho está establecido en diversas constituciones, por ejemplo en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, este derecho se encuentran consagrado desde su primer artículo, también diversos ordenamientos internacionales establecen este derecho como la Declaración Universal de los Derechos Humanos. La ilegalidad del aborto cobra la vida de 47 mil mujeres al año en todo el mundo, según estadísticas reunidas por el Guttmacher Institute, mujeres que tenían las ganas de seguir viviendo, estudiando, trabajando, pero que de acuerdo a muchos grupos sociales y religiosos cometieron un gran pecado que fue el de no querer ser madres y terminar con la gestación del embarazo. El aborto, al ser ilegal, no se desarrolló en las condiciones mínimas y miles de mujeres perdieron la vida.
Yo debo decidir sobre mi cuerpo: La concepción se lleva a cabo gracias al esperma que aporta el hombre pero la concepción ocurre en el útero de la mujer y todo el desarrollo del embarazo se lleva a cabo dentro de nuestro cuerpo no recibiendo ninguna ayuda del hombre, de hecho, en muchos casos ni se vuelve a ver al hombre desde que aporta su esperma; desde la concepción nuestros cuerpos sufren cambios y no sólo nuestro cuerpo sino toda nuestra vida, por lo que las mujeres debemos tener abiertas las dos puertas:
Primera Puerta: Estoy embarazada y quiero ser madre.
Segunda Puerta: Estoy embarazada y quiero terminar con el embarazo por que no quiero o no estoy preparada.
Algunos de los beneficios que traería consigo el aborto legal:
Vidas de miles de mujeres: Al ser legal el aborto las mujeres que así lo deseen podrán hacerlo en un hospital, ya sea público o privado, que tenga todos los servicios y las condiciones necesarias para llevarlo acabo y atender todas las complicaciones que se llegaran a presentar, con esto se salvaría la vida de miles de mujeres ya que serían atendidas en un lugar con las medidas de higiene, los servicios adecuados y el personal debidamente capacitado.
Disminución de niñas y niños en situación de calle o abandono: Actualmente muchas mujeres con el miedo de abortar e ir a prisión se ven se forzadas a llevar a término el embarazo y una vez que nace la o el menor los abandonan en cualquier calle, en cualquier esquina.
Mejora en la calidad de vida tanto de las mujeres como de sus hijos o hijas: Al poder elegir, las mujeres que realmente quieran ser madres llevarán el embarazo en las mejores condiciones posibles, le darán los mejores cuidados al o a la menor y le crearan un ambiente sano y lleno de amor donde crecer y desarrollarse, situaciones que no podrían darse si la mujer hubiera sido madre solamente por obligación o porque no le quedó de otra.
En las últimas letras de este texto y a manera de conclusión, propuesta y exigencia, les digo a todas las personas que en un momento lean esto y a las personas que tienen en sus manos la aprobación de la legalización del aborto, a ustedes que incursionan en la vida política de su país y a usted señor Papa; a ustedes, de quienes depende la vida de miles de mujeres, les digo que debe existir una educación sexual de calidad para poder decidir, que los anticonceptivos existen para no tener que abortar, y el aborto debe ser legal para no morir.
Claudia Carolina García. Feminista, madre soltera, abogada, maestra en estudios de género, oradora, polemista, que arde por la palabra libre, la verdad, la libertad y la emancipación de las mujeres.