Araceli había logrado superar las limitaciones naturales de la pobreza. Estaba a punto de recibir su título en Ingeniera Textil y llevaba ya cuatro meses trabajando en una fábrica de la ciudad de Puebla. A los 23 años, con sus victorias académicas y laborales, Araceli comenzaba la vida por la que tanto había luchado. A los 23 años se la arrebataron.
Tras una relación de más de dos años, Araceli decidió terminar su noviazgo con Javier, un albañil de 26 años de edad. Como suele suceder en casos atroces como éste, Javier no dejó de acosarla hasta que, después de seis meses de separación, se decidió por allanar la casa de Araceli una mañana de noviembre de 2013 y le perforó el corazón cuando tomaba una ducha.
La madre de Araceli alcanzó a ver a Javier cuando salía corriendo de la casa después de escuchar el grito de su hija. Al percatarse de la tragedia y sin perder un solo instante, la madre acudió desesperada ante las autoridades municipales de Acajete, Puebla, para dar noticia de los hechos. Como toda respuesta diez policías fueron a montar guardia afuera del baño donde yacía el cuerpo. De nada sirvieron las suplicas de los familiares de Araceli para que fueran a buscar a Javier, vecino de la comunidad y por ello fácilmente identificable: los diez policías coincidieron en que no podían perseguir al agresor “porque no tenían una orden”. Hoy nadie sabe dónde está el asesino de Araceli.
Una vez más las autoridades actuaron con indolencia, cubriendo las espaldas del asesino que huía. Una vez más la orden de aprehensión, girada tarde y mal, se quedó en “buenas intenciones”. Una vez más se trató de lucrar con el dolor cuando a la madre de Araceli se le acercaron dos tipos disfrazados de “licenciados” pidiéndole dos mil pesos para ayudarle a que saliera la orden. Una vez más una madre perdió a su hija de la forma más deleznable. Una vez más se apuesta al olvido.
Nosotros no olvidamos a Araceli, nos unimos al reclamo de justicia de su madre, Amada Barranco y nombramos a su asesino Javier Mauricio Díaz para no callarlo, para no callarnos, para no olvidar.
Información del caso: http://www.animalpolitico.com/2013/12/araceli-la-historia-de-un-feminicidio-impune-en-puebla/
Imagen: https://ciudadcero.wordpress.com/2014/06/26/la-ironia-no-tuvo-piedad-exigen-justicia-para-araceli/